Por fin he sacado algo de tiempo para dedicar al blog. Los parados tenemos una agenda apretadísima. Y ahora que puedo, no se me ocurre nada sobre lo que despotricar. Así que he pensado en hablaros de la presunta aparición fantasmal ocurrida en el aparcamiento subterráneo del Salón, en Écija.
Sí señores. Al parecer, y según dice la gente, una cámara de vigilancia captó una silueta espectral luminescente con forma humana que avanzaba hasta quedar frente a la máquina de tickets que hay en la primera planta de dicho aparcamiento. Acto seguido, atravesaba la pared (cosa muy propia de los fantasmas) en la cual había una enorme mancha de humedad que poco antes no estaba.
La terrorífica secuencia fue presenciada por el vigilante nocturno (que a tales horas se produjo el fenómeno) a través de los monitores. Este al parecer repuso la cinta de video donde había quedado registrado todo para cerciorarse de lo que acababa de ver. A partir de ahí, la noticia ha corrido por el pueblo como un reguero de pólvora.
Antes de continuar, quiero dejar constancia de que con esta entrada no pretendo cuestionar la autenticidad de este fenómeno, ni tampoco criticar a aquellos que creen en fantasmas. Es más, yo soy uno de ellos. Me encantan los temas paranormales y soy oyente del programa de Iker Jiménez, "Milenio 3", y lo era del de Santiago Vázquez, "Sexta Dimensión" hasta que RNE lo censuró. Afortunadamente sigue emitiendo su programa via podcast en la web www.masalladelarealidad.com bajo ese mismo nombre. Pero todo esto no viene ahora al caso.
Lo que sí voy criticar es la forma en que la gente ha tratado (o hemos tratado) la noticia. Para empezar, no le déis el más mínimo crédito a lo que yo os he contado, por si alguien pensaba hacerlo. Y no se lo déis porque mis fuentes no son directas y tampoco son muy fiables. Pero eso sí, una cosa es segura; ahí dentro ha pasado algo y se ha sabido. Y cada vez que la noticia ha dado un salto de una persona a otra, esta ha ido mutando. Como si el virus de la gripe se tratase. El resultado, 10.000 millones de trolas con una única cosa en común; están construidas en torno a los elementos "Aparcamiento" y "Fantasma". A partir de ahí, libertad creativa. Cada uno se ha ido tirando su propio rollo cada vez menos tragable.
Y luego además, están los listos que no han dejado pasar la oportunidad de hacerse oir. Unos para explicar el fenómeno, otros para confirmarlo, y otros para desacreditarlo. A todos ellos se les puede clasificar en los siguientes grupos:
1. El grupo de los que no lo vieron pero conocen al que lo vio.
Mentira. Esos no conocen de nada al que lo vio, pero quieren tomar parte en el asunto viendo que este ha suscitado el interés de la gente, para ostentar así cierto grado de protagonismo.
2. El grupo de los que no lo vieron pero tienen un primo que conoce al cuñado de uno que vive enfrente de la casa de la hermana del jefe del que lo vio.
Se lo acaban de contar unos que no tienen ni puta idea y ahora ellos le están metiendo al que tienen al lado una trola que no se la creen ni ellos mismos hartos de porros.
3. El grupo de los crédulos
No están seguros de si creen o no en este tipo de cosas. Pero se lo han contado. Eso es lo importante. Si se lo han contado, pues tiene que ser verdad, ¿no?. Si no... ¿para qué?.
4. Los que defienden la naturaleza paranormal del fenómeno
Por supuesto, lo que ahí abajo se vio era un fantasma. Y si andaba por ahí es por que ha dejado causas pendientes en esta vida, como Casper. Seguramente se trata de algún tema de herencias. O a lo mejor es el fantasma de alguien que perdió el ticket del parking y su alma sigue vagando en pena, rondando su coche, el cual no se atrevió a sacar del aparcamiento en vida por temor al pullazo que le iban a meter. ¿O quizás el fenómeno esté relacionado con el hecho de que el aparcamiento se construyó profanando el mayor cementerio islámico de Europa, de dónde se removieron más de 3.000 esqueletos humanos?.
5. Los escépticos que niegan la naturaleza paranormal del fenómeno y nos dan una explicación "lógica".
Que sería algo así como:
- La visión supuestamente paranormal se explica perfectamente si se tiene en cuenta que en el momento en que se produjo, un coche de gasoil entraba marcha atrás en el aparcamiento con las luces largas puestas, las cuales encima eran de xenón. Eso, el charco de agua que había en el suelo y los parámetros meteorológicos, que aquella noche eran de 20º C y una humedad relativa del 27% con una probabilidad de lluvia del 25%, sumando el ruido ambiental, la presión isobárica y uno que tiene un primo en Albacete que toca el bombo crearon unas condiciones atmosféricas idóneas para que se proyectara remotamente la figura de un rumano con los dientes de oro que en ese preciso instante estaba mangando cables en un cortijo a 5 km de Cañada Rosal -.
Dicho esto, sólo queda añadir que si queréis saber qué ocurre realmente en el dichoso aparcamiento, lo único que podéis hacer es pasar la noche ahí dentro y verlo vosotros mismos. Y de lo que te cuenten, créete la mitad.